Salomé es una mala de película. Fue una princesa idumea hija de Herodías y esposa de Herodes Filipo I. En los evangelios se le atribuye haber pedido la cabeza decapitada de San Juan Bautista. Muchos pintores han elegido a ambos, ella y el macabro regalo, como motivo para sus lienzos. Aquí la vemos en la versión de Tiziano, quien en una versión anterior ya se había retratado en la cabeza del Bautista.
Con fundamento o sin él, Salomé es representada como prototipo de la sensualidad . Una mujer fatal. Algunos críticos han identificado a la modelo con Lavinia, hija del pintor, parece que con poco fundamento.