María de Médicis era una florentina, biznieta de la reina Juana I de Castilla, en la descendencia de su hijo favorito, Fernando. Casó con el rey Enrique IV de Francia y fue regente del reino hasta la mayoría de edad de su hijo Luis XIII. Además de una mujer con intuición política, fue bailarina de ballet, coleccionista de arte y protectora de los artistas.
Este retrato del flamenco Frans Pourbus el Joven habita en el Museo de Bellas Artes de Bilbao.