En la librería del Museo del Prado está a la venta un libro sobre el Greco en cuya portada se reproduce una imagen de La dama del armiño. Al reverso se informa que no es seguro que dicho lienzo fuera pintado por Domenico Theotocopulos, sino que lo más probable es que su autora fuera Sofonisba Anguissola. Allí sigue el librito para quien guste verlo.

No es el único lienzo con el mismo nombre pues de la misma manera que cuando el pintor y el retratado son caballeros siempre hay alguien que se encarga de anotar el nombre, cuando se trata de mujeres los humanos tienden con frecuencia al olvido. Pues bien, mientras se creyó que La dama del armiño había sido pintada por el Greco se pensó que ella era Jerónima de las Cuevas, madre de su hijo Jorge Manuel. Descartada la autoría de Theotocopulos, ¿quién puede ser la dama cuyo retrato cuelga en Pollok House, el Museo de Glasgow?

Investigaciones recientes apuntan hacia Catalina Micaela de Austria, hija de Felipe II, duquesa de Saboya por matrimonio. Para poder comparar, ahí está el retrato de Catalina Micaela atribuido a Alonso Sánchez Coello, quien era pintor de cámara durante la estancia de Sofonisba en la corte de Felipe II.
Ocurre que, de la misma manera que las profesionales cobran menos que sus compañeros varones, cualquiera que sea su especialidad profesional, también entre los artistas ellos son más cotizados que ellas. Esta lamentable realidad explica la resistencia de muchos museos a certificar la autoría de una obra femenina, por temor a ver depreciado su catálogo.