Agostina Segatori era todo un personaje. De joven también había posado para Corot y Degas. Ahora, propietaria del Café du Tambourin (Café de la Pandereta), donde Van Gogh había expuesto sus cuadros en dos ocasiones, posa apoyada en una de las mesas del local, en forma de pandereta, con la mirada perdida. El pitillo en una mano y la cerveza sobre la mesa expresan su espíritu parisino bohemio y noctámbulo.
Algunos especialistas en la obra de Van Gogh creen que durante un tiempo mantuvieron una relación sentimental y que ella es la modelo retratada en Desnudo femenino de espaldas.